Treinta a treinta

Por Mariano Rovatti


Apostador compulsivo, Néstor Kirchner salió rápidamente a ocupar el centro de la escena política tras su derrota del 28 de junio. Sin permitirse el más breve duelo, el santacruceño salió enardecido a quemar las naves, logrando que a sólo sesenta días de lo que pudo ser su Waterloo, la totalidad de la agenda política esté escrita de su puño y letra.

La derrota de junio auguraba para Kirchner una fuga de lealtades hacia el peronismo disidente o hacia un sector del progresismo ilustrado. La intención del ex presidente fue consolidar el 30% de los votos obtenidos a nivel nacional, evitando esa fuga. Para ello, recurrió a su manual más básico: la confrontación, la máxima tensión, la lucha a matar o morir.

Kirchner sabe que Clarín, la clase media y el campo lo abandonaron para siempre. Dentro de su lógica, no tiene sentido intentar su reconquista. Todo lo que ha hecho Kirchner desde el 28 de junio ha tenido como intención, retener el 30% de los votos como piso para la aventura de volver a la presidencia en el 2011.

Así deben entenderse los embates contra el grupo Clarín y el campo; no sólo como meras “vendettas” contra sus ex aliados. Al multimedios, le pegó en uno de sus negocios más sensibles, el fútbol, que manejaba a su antojo desde ambos lados del mostrador. El grupo controla la empresa que tenía los derechos de televisación y era dueña de los cables que compraban el paquete.

El acuerdo de la Asociación del Fútbol Argentino y el gobierno ha sido una medida saludada con simpatía desde el sector más humilde de la población. El 60% de los argentinos es de Boca o de River, equipos que antes podían verse sólo por televisión codificada. El acuerdo –que implica un desvío de 600 millones de pesos hacia el fútbol- es sospechado de encubrir un gran negocio para pocos, sin control alguno, con fondos del Estado. El sector social que más puede sentirse molesto con el mismo es el que de todos modos el gobierno ya considera perdido. En cambio, fideliza a quienes votaron a Kirchner.

El segundo embate contra Clarín –la reforma a la ley de radiodifusión- también implica el rechazo de quienes ya no quieren saber nada con Kirchner, fidelizando a sectores “progres”, antes de que emigren hacia la formación de fuerzas independientes. Aquí también se oponen los multimedios, por intereses económicos y la clase media, preocupada por la posible reducción de la libre expresión que puede acarrear la aprobación del proyecto. Aquí también, en la lógica kirchnerista ello no resulta relevante ya que ambos ya están perdidos.

Además, este doble ataque a Clarín, lo es también para todos los multimedios, entre ellos el que integra Francisco De Narváez, obligado a quedarse callado en los debates por el fútbol y la ley de radiodifusión, por tener intereses directos en ambos. Así, el “colorado” ha tenido que privarse de tener protagonismo en dos de los asuntos más álgidos de la agenda actual.

El resurgimiento del conflicto con el campo también entra en esta lógica: para qué concederles lo más mínimo, si ya los perdieron. La confrontación le sirve a Kirchner para fidelizar su caudal, en especial el conurbano y los sectores “progres”.

En esta semana, Kirchner eliminó toda posibilidad de autonomía de su delegado en la gobernación bonaerense, Daniel Scioli. El gobierno le retuvo 140 millones de pesos del PAF, hasta que logró la salida del ministro de Asuntos Agrarios, Emilio Monzó, el único funcionario bonaerense que escuchaba al campo. La tibia independencia que mostró Scioli en la Rural, fue vapuleada por la realidad financiera, asfixiante para la provincia, que sin ayuda nacional no puede hacer frente a sus obligaciones del último trimestre del año.

También en esta semana, a través de calificados emisarios, hizo saber que Scioli es el candidato de Kirchner para la reelección en la gobernación, sacándolo de la carrera presidencial. Paralelamente, corrieron rumores de que el ex motonauta no estaría dispuesto a seguir siendo presionado como hasta ahora, y que podría tirar la toalla y asumir su banca de diputado nacional en diciembre, dejando la gobernación en manos de Alberto Balestrini.

El líder matancero está acostumbrado a otro estilo de hacer política. Curtido como pocos en la lucha por el poder, es difícil imaginarlo con la mansedumbre del actual gobernador. Igualmente, para él correría la misma presión financiera que para Scioli: al año fiscal le sobra un trimestre.

En el mismo período, la oposición ha recorrido un camino diferente. En el espacio del panrradicalismo, quedó como único emergente el Vicepresidente Julio Cobos. La elección de junio fue –como se esperaba- una semifinal en donde quedaron en el camino Elisa Carrió y Hermes Binner.

“Lilita” salió a romper el Acuerdo Cívico y Social, que ella misma construyó, pero parece que no podrá disfrutar. Apuesta a diferenciarse del resto de la clase política –oficialista y opositora- mostrándola como corrupta y pactista. Para poder reinstalarse en el universo presidenciable, necesita que se produzca un colapso político, económico y social que modifique estructuralmente el escenario político. El actual la deja afuera de toda conversación.

El gobernador santafecino en cambio, aceptó la realidad, y orienta su ambición a secundar a Cobos en la fórmula, lo que resulta bastante lógico en el escenario vigente. Aunque el mendocino sabe que el caudal del Acuerdo, un 30% igual al del kirchnerismo, le sirve como base, pero no le alcanza para ser presidente.

A diferencia de Kirchner, que lucha para sostener su piso y sin expectativas de sumar, Cobos parte tranquilo de su base del 30%, sin adversarios internos, y necesita agregar adhesiones. Las miradas van al peronismo disidente, en especial al de la provincia de Buenos Aires.

Desde el encuentro público que tuvieron Cobos y De Narváez antes de las elecciones, está latente la posibilidad de un entendimiento entre ambos. Al vicepresidente le falta una fuerza sólida en la provincia de Buenos Aires, en especial en el conurbano. Los resultados del 28 de junio obtenidos por el Acuerdo reflejan fortaleza en el interior de la provincia, pero resultan insuficientes en el Gran Buenos Aires.

En las últimas semanas, circularon rumores coincidentes de que Mauricio Macri estaría pensando en buscar la reelección local en el 2011, antes de dar el salto nacional. Su fuerza no existe en el interior del país, el peronismo no lo apoyará prácticamente en ningún distrito, y en la provincia de Buenos Aires, el dueño de la victoria ha sido De Narváez.

Por ello, Kirchner y Cobos parten de bases similares –el 30% de los votos, cada uno- existiendo un tercer grupo con el 40% restante. Pero este grupo no tiene unidad, sino que está compuesto por el peronismo disidente en sus distintas expresiones locales, el PRO, la centroizquierda y la izquierda en todos sus matices, y sectores independientes.

Una incógnita es qué hará el peronismo disidente. En realidad, éste es un concepto ideal, ya que el peronismo en sí y en especial el no kirchnerista, no ha encontrado aún un liderazgo común, ni una estructuración sólida y unificada. La figura emergente más importante es la de Carlos Reutemann, del que nunca se sabe si tiene la ambición necesaria para un proyecto presidencial. Pero también en este espacio están Mario Das Neves, Felipe Solá, Juan Carlos Romero y Alberto Rodríguez Saá. Además del retorno siempre esperado de Eduardo Duhalde a los primeros planos nacionales.

El ex Presidente viene recalcando que es necesario un pacto al estilo La Moncloa, y que no hay que ver al radicalismo como inhábil para gobernar. Pareciera que asume como inevitable el triunfo de Cobos, o que es su deseo que éste triunfe, para luego encabezar la reconstrucción del justicialismo.

Kirchner apuesta a llegar a una segunda vuelta con Cobos, en donde apelaría a golpear dentro del 40% no vertebrado, invocando la lealtad peronista y vinculando la figura del vicepresidente con la gestión de Fernando de la Rúa y la fallida experiencia de la Alianza.

Los primeros números de encuestas practicadas en las principales ciudades le da muy bien a Cobos, Macri y Reutemann, en ese orden. Un poco más lejos, Solá, y muy lejos, Kirchner, Carrió y el resto.

En 2011, el país cumplirá diez años seguidos de gobiernos peronistas, más allá de las sutilezas que a cada espacio les convenga destacar. ¿Estará dispuesta la sociedad a darle una nueva prórroga al justicialismo, aunque venga con otra denominación? Pareciera que no, sobre todo, por la necesidad ya expresada en esta última elección, de estilos más conciliadores entre la dirigencia nacional.

Para saberlo, todavía faltan más de ochocientos calientes días.

Buenos Aires, 3 de septiembre de 2009

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola Mariano.

Lamentablemente, debemos esperar los tiempos constitucionales...

¿Por qué digo: "lamentablemente"?

Porque nadie votó a Néstor Kirchner como director técnico de la Nación, sin embargo, los hilos de la Presidencia se manejan desde sus manos ¡con esa habilidad titiritera que hace temblar! Pero, claro, es necesario seguir con el proceso democrático y soportar... hmmm... digamos... ¿dos años más? ¡¡¡No por favor!!! El pueblo fue categórico con el rechazo a esta política patotera, pero Néstor no entiende los mensajes populares... más bien los genera.

De este modo, tendremos por dos años más a esta "Chirolita" en el sillón de Rivadavia, (que Chirolita me perdone la horrorosa comparación), cuya voluntad será "manejada" con este astuto artista detrás de los telones (ahora, con perdón de los artitas).

En estos dos años (laaaaaargos dos años) que nos esperan por delante, tendremos todo el tiempo que digerir -nos guste o no- la fórmula magistral recetada por Néstor Kirchner para una enfermedad que él mismo ha generado en la Argentina. Es obvio, que no nos sanará, sino que nos seguirá consumiendo las defensas.

Kirchner apuesta a crear crisis en donde no existe. No sabe gobernar de otro modo. Necesita la crisis para mantener el control. Esto es la base de los servicios secretos de inteligencia en todo el mundo (ver "El Cisne, Espía de Franco y de Trujillo" de Luis Gonzalez-Mata Lledó, Editorial Grijalbo). Éstos, cuando no hay conflictos, ni inseguridad, deben generarlos para poder mantener la razón de su propia existencia.

La guerra fría terminó, pero nació el terrorismo internacional. Si alguna vez se le pone fin a esto, se renovará otro tipo de conflicto que dé sentido a la existencia de la CIA, Mosad, SIDE, MI6, etc. etc. etc.

En el libro mencionado, el autor refiere haber sido contratado por la CIA (de EEUU) para que estreche vínculos con la diplomacia de Francia y se convirtiera en la mano
derecha del presidente Francés (en aquel momento) De Gaulle. ¿Para qué? Para que le llenara la cabeza a De Gaulle en contra de los EEUU, y de ese modo, EEUU podría tener la ocasión de enfrentarse bélicamente con Francia !!!

Finalmente EEUU debió dar marcha atrás con su plan, pero el agente llegó muy lejos en el trabajo, logrando oponer a De Gaulle con los EEUU. Pero quedó desenmascarado el "modus operandi" de los servicios secretos.

(sigo en otro comentario)

Anónimo dijo...

(Continúa de otro comentario previo)

Cualquier similitud con un agente de la CIA llamado Ben Laden, es mera coincidencia. Tanta coincidencia como que las empresas Enron (que habían puesto en juego el gobierno de Bush hijo) poseían muchísima información de sus transacciones en el "emporio comercial" montado en las dos torres de Manhattan. ¿Quién se beneficiaba más con la voladura de las dos torres? ¿Un pueblito "vengativo" de rebeldes musulmanes? ¿O el mismísimo Bush, que posteriormente podría utilizar el incidente (tal como lo hizo), para obligar a la ONU a hacer la "vista gorda" ante los "ataques preventivos" de EEUU en las zonas del golfo, saqueando petróleo, tomando posiciones políticas en los países orientales y fijando las pautas para los próximos años en la región?

Y... ¿Quién sabe? A lo mejor, esta etapa "revolucionaria bolivariana" a la que nos está empujando Chavez, y quizá los Kirchner, sea una secreta trama de enredos tejidos con sutiles puntadas desde contactos con la CIA y demás, para que en el futuro, un "Pascual" cualquiera nos convierta en el "enemigo de los Americanos" y éstos puedan aprovechar tal "etiqueta" para venir a bombardear sin problemas nuestro pueblo y finalmente quedarse con todos los recursos naturales y beneficios agropecuarios de nuestro suelo "por dos pesos" y enarbolando ante el mundo la consigna de "ataques preventivos hacia la Argentina".

¿Suena apocalíptico? Los informes de la falta de agua potable (primer recurso natural no renovable para la vida) que tendremos en el planeta en algunos años... ¿no podrían ser un buen argumento de los servicios de inteligencia para "tejer", por debajo de esta maqueta visible que hemos dado en llamar "realidad", nuevas formas de adueñarse en el futuro de dicho recurso?

No quiero seguir ahondando en este tema...

¿Por qué publico como Anónimo?

Bueno, esa es una historia más compleja... Pero cabe decir que los servicios de inteligencia llegan muy lejos en el rastreo de la información. Quizá yo mismo esté aprovechando este mensaje encubierto para que me den un trabajo en sus filas (¿eh, chicos de la SIDE?) jajaj!

Anónimo dijo...

(Continúa de otro comentario previo)

Cualquier similitud con un agente de la CIA llamado Ben Laden, es mera coincidencia. Tanta coincidencia como que las empresas Enron (que habían puesto en juego el gobierno de Bush hijo) poseían muchísima información de sus transacciones en el "emporio comercial" montado en las dos torres de Manhattan. ¿Quién se beneficiaba más con la voladura de las dos torres? ¿Un pueblito "vengativo" de rebeldes musulmanes? ¿O el mismísimo Bush, que posteriormente podría utilizar el incidente (tal como lo hizo), para obligar a la ONU a hacer la "vista gorda" ante los "ataques preventivos" de EEUU en las zonas del golfo, saqueando petróleo, tomando posiciones políticas en los países orientales y fijando las pautas para los próximos años en la región?

Y... ¿Quién sabe? A lo mejor, esta etapa "revolucionaria bolivariana" a la que nos está empujando Chavez, y quizá los Kirchner, sea una secreta trama de enredos tejidos con sutiles puntadas desde contactos con la CIA y demás, para que en el futuro, un "Pascual" cualquiera nos convierta en el "enemigo de los Americanos" y éstos puedan aprovechar tal "etiqueta" para venir a bombardear sin problemas nuestro pueblo y finalmente quedarse con todos los recursos naturales y beneficios agropecuarios de nuestro suelo "por dos pesos" y enarbolando ante el mundo la consigna de "ataques preventivos hacia la Argentina".

¿Suena apocalíptico? Los informes de la falta de agua potable (primer recurso natural no renovable para la vida) que tendremos en el planeta en algunos años... ¿no podrían ser un buen argumento de los servicios de inteligencia para "tejer", por debajo de esta maqueta visible que hemos dado en llamar "realidad", nuevas formas de adueñarse en el futuro de dicho recurso?

No quiero seguir ahondando en este tema...

¿Por qué publico como Anónimo?

Bueno, esa es una historia más compleja... Pero cabe decir que los servicios de inteligencia llegan muy lejos en el rastreo de la información. Quizá yo mismo esté aprovechando este mensaje encubierto para que me den un trabajo en sus filas (¿eh, chicos de la SIDE?) jajaj!

Anónimo dijo...

(Continúa de otro comentario previo)

Cualquier similitud con un agente de la CIA llamado Ben Laden, es mera coincidencia. Tanta coincidencia como que las empresas Enron (que habían puesto en juego el gobierno de Bush hijo) poseían muchísima información de sus transacciones en el "emporio comercial" montado en las dos torres de Manhattan. ¿Quién se beneficiaba más con la voladura de las dos torres? ¿Un pueblito "vengativo" de rebeldes musulmanes? ¿O el mismísimo Bush, que posteriormente podría utilizar el incidente (tal como lo hizo), para obligar a la ONU a hacer la "vista gorda" ante los "ataques preventivos" de EEUU en las zonas del golfo, saqueando petróleo, tomando posiciones políticas en los países orientales y fijando las pautas para los próximos años en la región?

Y... ¿Quién sabe? A lo mejor, esta etapa "revolucionaria bolivariana" a la que nos está empujando Chavez, y quizá los Kirchner, sea una secreta trama de enredos tejidos con sutiles puntadas desde contactos con la CIA y demás, para que en el futuro, un "Pascual" cualquiera nos convierta en el "enemigo de los Americanos" y éstos puedan aprovechar tal "etiqueta" para venir a bombardear sin problemas nuestro pueblo y finalmente quedarse con todos los recursos naturales y beneficios agropecuarios de nuestro suelo "por dos pesos" y enarbolando ante el mundo la consigna de "ataques preventivos hacia la Argentina".

¿Suena apocalíptico? Los informes de la falta de agua potable (primer recurso natural no renovable para la vida) que tendremos en el planeta en algunos años... ¿no podrían ser un buen argumento de los servicios de inteligencia para "tejer", por debajo de esta maqueta visible que hemos dado en llamar "realidad", nuevas formas de adueñarse en el futuro de dicho recurso?

No quiero seguir ahondando en este tema...

¿Por qué publico como Anónimo?

Bueno, esa es una historia más compleja... Pero cabe decir que los servicios de inteligencia llegan muy lejos en el rastreo de la información. Quizá yo mismo esté aprovechando este mensaje encubierto para que me den un trabajo en sus filas (¿eh, chicos de la SIDE?) jajaj!