Ola de eurófobos en el Viejo Continente



Por Cécile Chambraud y Alain Salles

París-Londres-Copenhague. Tal es el trío ganador de la extrema derecha,después de las elecciones europeas del Domingo 25 de mayo. El Frente Nacional , el UKIP y el Partido Popular Danés (Dansk Folkeparti, DF) ganadores en sus respectivos países, causando un terremoto. Marine Le Pen dinamita el paisaje de la política francesa, como Nigel Farage, líder del UKIP, que aplasta a los conservadores y Trabajo por delante. En Dinamarca , DF y cinco puntos por delante de los socialdemócratas. Ellos son la imagen más visible de esta parte de la onda eurófoba en el asalto del Parlamento Europeo para destruir desde adentro.

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Cuando no están en primer lugar, los partidos anti-europeos obtuvieron porcentajes significativos en Austria , en Hungría , en Suecia y Grecia . En Italia , Beppe Grillo (21%) está muy por detrás en la lista del presidente de centroizquierda, Matteo Renzi (41%), que ha templado su legitimidad democrática en esta elección. Pero el ex cómico enviará una veintena de diputados.

Sin embargo, en la extrema derecha han habido algunas decepciones que impiden que la ola electoral se convierta en tsunami. En Holanda , el aliado cercano de Marine Le Pen, el Partido de la Libertad de Geert Wilders, ha disminuido en comparación con 2009. Del mismo modo, en Helsinki, los Verdaderos Finlandeses no entran en la tercera posición, mientras que algunas encuestas los colocaron en mente. Por último, en Bratislava, el Partido Nacional Eslovaco ha fallado en hacer elegir a cualquier eurodiputado, que será un problema para Marine Le Pen, en su búsqueda de aliados de extrema derecha.

Los partidos eurófobos tendrán más de 140 miembros, casi una quinta parte del Parlamento. Pero van a encontrar dificultades para entenderse en Estrasburgo y Bruselas. Representan tribus que desconfían unos de otros.

Con la excepción de Beppe Grillo, que es inclasificable, que son todos los relacionados con las tradiciones de extrema derecha, incluso si a veces quieren que se olvide. Partidos populistas nórdicos están tratando de borrar su origen y rechazar la extrema derecha - a excepción de los suecos, que aún se muestran reticentes - una alianza con el Frente Nacional. Ellos han hecho mucho su enfoque político que impulsa a colaborar con los gobiernos dirigidos por los partidos tradicionales, como en Finlandia o Dinamarca en la anterior legislatura.

El Partido Popular danés no excluyó la posibilidad de apoyar al gobierno Social Demócrata de Helle Thorning-Schmidt. Se sienten más cerca de Nigel Farage (UKIP) que de Marine Le Pen.

El presidente del Frente Nacional intentó, también, de normalizar su partido para hacerlo más presentable. Ella convenció a un gran número de votantes. Pero la mala reputación del partido de Jean-Marie Le Pen y sus comentarios antisemitas siguen asustando a Nigel Farage y escandinavos.

La última tribu se considera fuera de los límites por los miembros del grupo como el señor Farage. Incluye los partidos neonazis, como el Jobbik húngaro o Golden Dawn en Grecia, que enviarán respectivamente tres y dos diputados.

Un tema, sin embargo, los reúne: el odio a la inmigración. Su primer objetivo es la presencia de extranjeros no europeos. Geert Wilders fue a prometer a sus seguidores a desocupar de marroquíes los Países Bajos. La Liga Norte italiana, el FPÖ austríaco, el Partido del Pueblo Danés, el Verdaderos Finlandeses, el Frente Nacional, sin siquiera hablar Jobbik y Golden Dawn volverá como un eco esta obsesión compartida.

Sólo Movimiento 5 estrellas Beppe Grillo parece por el tiempo que se ahorra, aunque el líder parece estar tratando de seguir la pendiente. "¿Cuántos inmigrantes podemos acomodar si un italiano ocho no permitirse comer ? " si hubiera dicho a los senadores de su partido que querían abolir el delito de "inmigración ilegal" creado por un ex ministro de la Liga Norte. Pero para todos los demás partidos eurófobos, la hostilidad hacia el Islam se ha convertido en la cara más visible de su xenofobia.

Dominante en los partidos tradicionales

La novedad del campo europeo, es a la inmigración intraeuropea mostrado hostilidad por parte de los nuevos Estados miembros como Bulgaria y Rumania. El UKIP se ha hecho una especialidad. "Veinte y seis millones de personas en Europa en busca de trabajo. ¿Y qué trabajos desean tomar ? " , cuestionó sus carteles de campaña. Pero no es el único puesto de que se trate, de una manera u otra, la libertad de circulación en el mercado único europeo, uno de los principales logros de la integración europea. Con otros, el Partido Popular danés subrayó en su campaña sobre los beneficios concedidos a los ciudadanos de la UE.

En tiempos difíciles, la tentación de la retirada y el rechazo de los extranjeros está presente. Sin embargo, la onda eurófoba registrada el 25 de mayo no resuelve la crisis de Europa. Afecta a muchos países en la competencia y la economía dinámica, como Dinamarca y Austria, o la recuperación total, ya que el Reino Unido , afirma que languidez y dolor reformas afectadas, tales como Francia o afectados por la recesión, como Grecia.

Por el contrario, los países golpeados por las políticas fiscales restrictivas están libres de cualquier populismo. Este es el caso de Irlanda , hay poco fuera del plan de asistencia , o Portugal . Esto también es cierto en España . Una vez más, los partidos tradicionalmente dominantes están en declive: el Partido Popular Conservador y el Partido Socialista atrajeron menos de dos votantes cuando tenía cinco años atrás, se habían encontrado ocho de cada diez. Pero la novedad no vino con un reflejo anti-europea o anti-inmigrante. Venía de los nacionalismos regionales, exasperado por la situación de Cataluña, la izquierda radical y el movimiento después de que el movimiento de los "indignados".

Recomposición política no es, inevitablemente, todo el resultado de la extrema derecha.

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Éxito mixto para partidos independentistas

En tres regiones europeas trabajadas por tentaciones separatistas, los votantes se aprovecharon de las elecciones europeas de expresar. En Flandes de Bélgica, donde la encuesta se acopló a la región y de las leyes, la Nueva Alianza Flamenca (NVA), el partido separatista Bart De Wever, el triunfo. Él es líder en casi todos los cantones flamencos. Hubiera ganado 30% al 33% de los votantes, lo que marca un crecimiento fuerte aún. En Cataluña, donde el gobierno local quiere celebrar un referéndum sobre la libre determinación, el 9 de noviembre, el partido separatista dejó Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) se gana. Con 23,67% de los votos, que incluso derrotó a la coalición nacionalista CiU Artur Mas Presidente del Gobierno regional (21,86%). Más radical, ERC seguramente complicará el proceso muy delicado iniciado por el señor Mas, en la medida en que el gobierno central español no quiere oír hablar de un referéndum.

En Escocia, por último, en un referéndum sobre la independencia se llevará a cabo el 18 de septiembre, el Partido Nacional Escocés ganó 28,9% de los votos, por debajo de las expectativas y el 37% que predijo las urnas.

Publicado en Le Monde

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