Cuesta abajo

Por Mariano Rovatti

El rol de la Corte. Los multimedios quedan intactos durante todo el 2011. Scioli ganó terreno. Cristina y Néstor cambian de planes. La aventura de Massa. El bastión de Moyano. La nueva CTA. 82%: jaque a la Reina. Más aislamiento.


Los hechos políticos de las últimas semanas muestran –con sentido inequívoco- el rumbo de los acontecimientos que habíamos previsto meses atrás: la declinación del kirchnerismo ya es un proceso inexorable.

El fallo de la Corte Suprema de Justicia ratificando la validez de la medida cautelar dispuesta contra el art. 161 de la Ley de Medios significa una herida mortal para el proyecto de continuidad kirchnerista. Gracias a esta decisión, los multimedios permanecerán incólumes durante toda la campaña del 2011, lo que ocasionará que los mismos –y en especial el grupo Clarín- pasen por la máquina de picar carne a las imágenes de Néstor Kirchner y Cristina Fernández. La influencia de aquéllos es decisiva sobre el ánimo de la población en los grandes centros urbanos, donde se concentra el mayor número de votos.

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Clarín y la mayoría del resto de los multimedios tienen la determinación de acabar con el kirchnerismo, y este fallo les suministra la herramienta necesaria: no estarán obligados a desmembrarse durante más de un año.

Otro episodio que lesiona la fortaleza del gobierno es el conflicto suscitado con Daniel Scioli, quien al igual que Julio Cobos y Mauricio Macri, ha sido fortalecido tan sólo por el hecho de enfrentarse con Kirchner.

El gobernador ha obtenido un crédito por quinientos millones de pesos, lo que le permitirá manejarse con una inédita autonomía del poder central. Apoyado por la mayoría de los intendentes del conurbano, por primera vez Scioli tiene en sus manos la posibilidad de determinar su proyecto político.

Aparentemente, éste sería la reelección en la gobernación. La hipótesis de romper definitivamente con Kirchner no está descartada, pero sería utilizada sólo en caso de necesidad. El gobernador conserva un as en la manga: la posibilidad de convocar a elecciones provinciales en fecha diferente a la elección nacional.

En la semana pasada, Kirchner y Scioli habrían acordado que el Pingüino no promoverá el reemplazo del Manco en el sillón de Dardo Rocha, ni pretenderá la listas colectoras, lo que hubiese significado una derrota segura de Scioli. La insólita manifestación de Kirchner realizada el último viernes anunciando su mudanza a Santa Cruz, es una prueba concreta de que ha asumido su debilidad sobreviniente, renunciando a influir en el destino político bonaerense.

Todo ello lleva a la candidatura presidencial de Cristina Fernández, quien mide ligeramente mejor que su marid, y se apresta a encarar el último año de su gestión con un marco favorable de la economía mundial.

Las especulaciones sobre la eventual candidatura de Scioli a la presidencia pierden fuerza frente a estas circunstancias, amén de la ponderación de la naturaleza política de los Kirchner y del peronismo en general: el poder no se le regala a nadie, y se pelea por él hasta el último momento, cueste lo que cueste y caiga quien caiga.

Además, a Scioli no le está garantizada la victoria en una elección presidencial, más aún si él la asume desde la posición de oficialista. En cambio, la reelección como gobernador aparece como más accesible, mediando el apoyo de las estructuras provincial y municipales. En el caso de una victoria radical, Scioli sería desde la gobernación el referente obligado de la reunificación peronista.

El debilitamiento de la salud del ex presidente también alimenta la alternativa de la candidatura de Cristina. El sistema cardiovascular de Kirchner puede colapsar en cualquier momento y el trajín de una campaña electoral –que se presume muy dura- sería muy riesgosa para su integridad física. Además, el estilo de Lupín se caracteriza por la entrega total sin medias tintas, y ello no será admisible para sus médicos ni para su familia, quienes ya la habrían marcado claramente cuáles son sus límites.

En la provincia de Buenos Aires, crece la formación de un núcleo autónomo –aun no disidente- encabezado por los intendentes Sergio Massa y Pablo Bruera. Rumores insistentes –adelantados por ArgenPolitica meses atrás- indican que el primero intentaría la aventura de la candidatura presidencial, y el segundo, la postulación a la gobernación. La juventud del grupo los invita a tentar suerte para posicionarse de cara al 2015, previendo que la sociedad quiera descansar un poco del peronismo después de una década de distintos gobiernos del PJ.

En el ámbito sindical, crece el proyecto de independencia de Hugo Moyano, quien armó una estructura nacional tendiente a llenar el Congreso de legisladores de extracción gremial, comenzando por él mismo, quien dejará la CGT en el año 2012, siendo su probable reemplazante el taxista Omar Viviani, actual n° 3 en la jerarquía de la central obrera. El marco político de ese momento determinará la viabilidad de este deseo del hábil camionero.

Desde la presidencia del PJ provincial Moyano hará valer todo el poder político y económico acumulado durante estos años, para tener decisiva influencia en el armado de las listas y en el diseño de la política global del peronismo. Se anticipa un fuerte conflicto con el sector político, con la posibilidad de que se repitan escenarios que llevaron al peronismo a derrotas y aislamiento del resto de la sociedad.

La victoria de Pablo Micheli en la elección de la Central de Trabajadores Argentinos (CTA), fue otro golpe al oficialismo. Además de la derrota del oficialista Hugo Yaski, el resultado augura un período de conflictos en el aparato estatal, dada la influencia de aquélla entre la planta de personal del sector público. Políticamente, se espera una fuerte oposición, teniendo como reclamo base el de la libertad de asociación sindical, principio sostenido por la Organización Internacional del Trabajo, y ratificado por la Corte Suprema de Justicia de hace dos años.

El triunfo de Micheli significa para el espacio político que integra junto con Víctor De Gennaro, Claudio Lozano y eventualmente Fernando Solanas, la posibilidad de contar por primera vez con una estructura sólida diseminada a través de todo el territorio nacional, que le permitirá contar con recursos económicos y humanos como nunca antes habían tenido para una elección.

Si este espacio acuerda una candidatura presidencial para De Gennaro y la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires para Solanas, podrían lograr dos objetivos importantes: la consolidación a nivel nacional, comiéndole votos por izquierda a los Kirchner, y acceder al poder en la ciudad autónoma, el segundo distrito más importante del país.

En el ámbito judicial, además del fallo mencionado, se agregan dos hechos significativos: las dos derrotas oficialistas consecutivas en las elecciones de abogados para el Consejo de la Magistratura, lo que significó la pérdida del control de éste por parte del kirchnerismo; y el fallo obligando a la reposición de Eduardo Sosa en el cargo de Procurador General de la provincia de Santa Cruz, generando un conflicto de poderes con la misma. Todo ello, agregado a la multiplicación de acciones penales por presuntos hechos de corrupción de funcionarios de distinto rango, que pueden acelerarse en cualquier momento.

En el terreno legislativo, tras la sanción de la Ley de Glaciares, contrariando la voluntad presidencial, el Senado se apresta a tratar el 82% móvil para jubilados y pensionados, que generaría una fuerte herida para las finanzas públicas o un alto costo político para la Presidenta si se decide a vetar la ley que eventualmente se apruebe. Si es así, el gobierno perderá, pase lo que pase.

En el plano internacional no le va mejor al gobierno, acentuándose su aislamiento y pérdida de respeto del mundo. En su visita a Alemania, además de la propicia ocasión que le brindó la exposición del libro de Frankfurt, la Presidenta recibió reproches de la canciller Angela Merkel, por la decisión de no pasar por el Fondo Monetario Internacional para refinanciar la deuda con el Club de París, en el que Alemania es el principal acreedor.

Tras otro fallo judicial adverso, el gobierno le dio asilo político al terrorista chileno Sergio Apablaza Guerra, reclamado por el gobierno de Sebastián Piñera para ser juzgado por la justicia de ese país. Increíblemente, el gobierno argentino prefirió darle el gusto a organizaciones como las Madres de Plaza de Mayo, que preservar la relación con Chile que hasta el momento estaba libre de conflictos. Apablaza está acusado de cometer homicidios después de la retirada del dictador Augusto Pinochet.

Paralelamente, el gobierno británico comenzó acciones militares en las Islas Malvinas, desestabilizando la región, provocando a la Argentina y a todo el continente, poniendo al descubierto la debilidad de nuestra posición respecto a la recuperación del archipiélago para el patrimonio nacional.

Finalmente, dos tragos amargos vinculados a los premios Nobel: Mario Vargas Llosa recibió el galardón de Literatura, dedicando la mayor parte de sus salidas en medios argentinos a alabar a Jorge Luis Borges y a denostar a los Kirchner. Como frutilla del postre, el esperado premio de la Paz para las Abuelas de Plaza de Mayo, finalmente fue para un ignoto chino.

Buenos Aires, 12 de octubre de 2010.

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