Scioli en un callejón sin salida

por Mariano Rovatti


Los hechos van todos en la misma dirección. La imposición de Gabriel Mariotto en la fórmula, las listas de diputados nacionales y provinciales hechas en la Casa Rosada, nueve meses sin girarle un peso a la provincia, el consecuente ahogo financiero, el trato directo con intendentes, y ahora, la humillación pública. Además de los primeros movimientos a favor de la reforma constitucional.

  (para leer la nota completa, cliquear sobre el título) Ya no quedan dudas de que la Casa Rosada impulsa la caída de Daniel Scioli.


 La única razón es la brutal concepción del poder del kirchnerismo. Cristina no tiene reelección según la Constitución Nacional. Frente a ese límite, el candidato natural del Partido Justicialista es el Gobernador bonaerense. Pero para el Frente para la Victoria no lo es. Hoy, al gobierno le faltan sólo cuarenta manos en la Cámara de Diputados y ocho en el Senado para que se vote la ley de necesidad de reforma. Los test de YPF y Reposo confirmaron la cercanía a esos números. Ya hemos analizado que los votos radicales y socialistas no serán un problema para el cristinismo.


 El límite real es político y se basa en la popularidad de Scioli, que fruto de esta crisis habría empezado a decaer. Aún así, sigue muy por encima de Cristina, quien viene en caída libre en la consideración popular. Incluso entre aquéllos defensores de buena fe del modelo.


El gobernador representa otras cosas que la Presidenta, tanto en la ideología como en el estilo de hacer política. Por ello, es que el gobierno quiere sacarlo de la cancha a Scioli, para que no haya otro candidato que Cristina, y así forzar a la re-reelección.


 No sería de extrañar que si se concreta la salida del gobernador, una vez ubicado Gabriel Mariotto en su lugar, los fondos empiecen a llegar. Conviene recordar que esos fondos se los debe la Nación a la Provincia, no se trata de una ayuda. En ese mismo rumbo hay que situar al vínculo tendido a través de Julio De Vido, quien así encontró una forma de resucitar, con los intendentes, quienes empiezan a sentir que la solidaridad con Scioli no les conviene.


 El gobernador paga su falta de defensa de los intereses provinciales. Buenos Aires aporta a la Nación desproporcionadamente más de lo que recibe. Scioli fue el gobernador que consintió la pérdida de aportes, y luego el incumplimiento de las obligaciones de la Nación. El no busca el conflicto, pero el conflicto lo busca a él. Y frente a ello, la respuesta de Scioli sólo pasa por lo simbólico, mirando cómo dan las encuestas, cuyos resultados siempre son volátiles.


 Nuevamente, el cristikirchnerismo juega al límite. Para lograr la caída de Scioli, el gobierno debe generar condiciones de ingobernabilidad que se le pueden volver en contra a sí mismo. Este embate contra el gobernador no se da en un contexto donde la economía funciona sin problemas, sino todo lo contrario. La inflación y los ajustes auguran una época de alta conflictividad social, con lo que el cóctel es altamente explosivo y autodestructivo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

"El no busca el conflicto pero el conflicto lo busca a el"...Esa frase me resultó una brillante síntesis del excelente artículo publicado!!! Saludos de un consecuente lector, y Amigo. Chirolius.