A medida que vaya habiendo más información sobre los detenidos, iremos teniendo una idea más fundamentada sobre quiénes son los que están detrás de los saqueos. Sean quienes fuesen los instigadores y sus motivaciones, el hecho merece el más enérgico repudio de la sociedad. No hace falta esto para poner en evidencia la pobreza creciente en todo el país. No necesitamos poner a prueba la gobernabilidad. Es verdad que estamos frente a un gobierno que no tiene agenda, sino obsesiones, pero nada bueno para la Patria surgirá del caos. Este año habrá elecciones, y será la oportunidad que tendrá el pueblo de forzar el necesario cambio de rumbo del gobierno.

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